Nuestra Identidad

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El Guerrero Azteca

En la Escuela de Licenciatura en Organización Deportiva, origen de la FOD, se adoptó como efigie representativa un icono de la historia mexicana: el Guerrero Azteca.

En 1978 el Ing. Ingeniero Cayetano E. Garza Garza, fundador de la Facultad, instó a profesores y alumnos a buscar una figura emblemática que fuera acorde al deporte, surgiendo entonces el Guerrero Azteca.

En la sociedad prehispánica el Guerrero Azteca fue valorado por su carácter y disciplina, virtudes que desarrollaban a base de muy variados ejercicios físicos y de destrezas.

La guerra jugó un rol preponderante en la sociedad azteca. De ahí la necesidad de forjar y mantener una estructura militar que se reflejó en la cultura, religión y en toda la sociedad.

El entrenamiento militar fue parte de su formación integral como individuos, por lo que realizaban ejercicio físico y procuraban la buena condición física, así como la práctica de diferentes juegos que no representaban más que actividades religiosas y festividades para honrar a sus dioses.

En los años previos a la Conquista los Guerreros Aztecas practicaron carreras de largas distancias, gimnasia y acrobacia, lucha, tiro al blanco con arco y cerbatana, juego de la pelota, cacerías y posiblemente algunas actividades acuáticas.

Texto adaptado del libro “Transformar el deporte. 45 Años de la Facultad de Organización Deportiva” (Pérez García y Piña-De la Fuente, UANL, 2019).

Los colores

En la actualidad los colores oficiales de la Facultad siguen siendo los originales: guindo, azul y blanco. 

Se asegura que el Ing. Cayetano E. Garza Garza, fundador de la FOD, sugirió a profesores y alumnos usar el color guindo por estar él habituado al tono identitario de la escuela donde estudió: Ingeniería Civil de la UANL.

Para evitar confusión con esa y otras facultades y preparatorias de la UANL que ya usaban el color guindo como rasgos de institucionalidad, se agregó el color azul para marcar diferencia.

El azul también fue escogido por la Facultad por obvias razones: mantener el estrecho vínculo con la UANL, que lo posee como parte de su identidad, unido al oro o amarillo.

El color blanco fue escogido por ser muy representativo del deporte de la década de los 70: los profesores de educación física vestían y calzaban de blanco y en las primarias y secundarias el blanco era base de la vestimenta para las mismas clases de educación física, tablas gimnásticas y otras actividades escolares.

En culturas occidentales el color blanco representa pureza, inocencia y paz.

Texto adaptado del libro “Transformar el deporte. 45 Años de la Facultad de Organización Deportiva” (Pérez García y Piña-De la Fuente, UANL, 2019).

La porra

Desde los primeros años de la Escuela de Licenciatura en Organización Deportiva, fundada en 1974 por el Ing. Cayetano E. Garza Garza, existió una porra oral que decían sus alumnos en los eventos deportivos donde contendían sus equipos representativos.

El significado del texto se desconoce, así como el autor o autores de este. Ese “grito de guerra” se extinguió a finales de los años 80.

Decía así:

¡Saco, rico, saco

FOD, FOD, FOD

Saco, saco, saco!

(Mencionado dos veces)

Después, quizás a inicios de los años 90, surgió otra porra oral que es la que sigue vigente y de la que también se desconoce su autoría. Ésta dice así:

¡Eeeeeeeeeeh,

Un, dos, tres,

FOD, FOD…

Guerreros!

(Mencionado una vez)

Texto adaptado del libro “Transformar el deporte. 45 Años de la Facultad de Organización Deportiva” (Pérez García y Piña-De la Fuente, UANL, 2019).

Promesa profesional

Los egresados de la Facultad de Organización Deportiva carecen de un código de ética profesional. Sin embargo, desde los años 80 se cuenta con un Juramento del Organizador Deportivo, carrera profesional que originalmente se ofertó en la Facultad.

Los alumnos que llegaban al examen de titulación lo decían oralmente, o por lo menos lo leían, ante el cuerpo docente que hacía la labor de sínodo, con lo que quedaba sellado el compromiso del egresado con su Facultad, con la Universidad y con la sociedad. 

Este pacto noble y voluntario hace alusión a conocidos pasajes de la mitología griega, romana y mexica. También hace alusión al Juramento Hipocrático de los médicos, considerado el primer código de ética profesional de la historia.

Combina los valores surgidos de esas culturas con el entorno deportivo y con la profesión de organizador deportivo, que ha ido modificándose hacia diversas licenciaturas.

Después de este protocolo el egresado firmaba el acta que lo acreditaba como profesionista.

Promesa del egresado de la FOD1

[Título original: Juramento del Organizador Deportivo (Mtro. Luis Tijerina)]

Prometo por Zeus Olímpico, por Poseidón, por Apolo y por Heracles,

por la sombra de Hífitos y Pelopeo, por todos los héroes de la Antigua Grecia,

ante ustedes mis sinodales que hoy me confieren en el mundo profesional el grado de

Licenciado en Organización Deportiva2.

Prometo también por Tlacaélel, por Nezahualcóyotl,

y por la memoria de todos los Guerreros Aztecas.

Comprometo mi honor a la sombra y memoria de Hipodemia,

que, a partir de hoy, como Organizador Deportivo2,

normaré mi conducta profesional con estos lineamientos:

Guardaré siempre gratitud y respeto por mis padres y maestros,

ya que gracias a ellos he llegado a ser profesionista.

Enarbolaré en alto, en todo momento, el nombre y los colores de mi amada

Facultad de Organización Deportiva.

Defenderé y honraré a mi Alma Mater,

la Universidad Autónoma de Nuevo León.

Observaré la ética profesional que debo para con mis compañeros

y todas las personas puestas a mi atención.

Seré limpio de espíritu y cuerpo, y mi pensamiento no se apartará

de las líneas de conducta del deportista honorable.

Enseñaré al que no sabe con gusto y ahínco como yo fui enseñado.

Pondré todos mis conocimientos al servicio de mis semejantes y de mi patria mexicana.

No me valdré de subterfugios ni ilegalidades para lograr mis objetivos.

Recordaré siempre que, ante todo, soy un profesionista que debe conducirse como tal.

Seré discreto y humilde en la victoria,

y fuerte y sereno en la derrota,

no permitiendo que las emociones mezquinas se apoderen de mí.

Si cumplo con estos preceptos que al final de mi vida se me declare Periodonikes

y que la sombra de Ahuízotl me unja campeón Águila Cuauhuotlato.

Y si miento y falto a esta solemne promesa,

que mi espíritu sea despeñado a los antros desde la roca Tarpeya por toda la eternidad,

que la sociedad me señale y que mi madre escuela me desconozca como su hijo.

Notas:

1El texto original fue concebido por su autor, como juramento.

En el ámbito olímpico el juramento fue usado desde 1920 para recordarles a los deportistas, y más tarde a árbitros y entrenadores, el compromiso latente que tienen con el juego limpio.

El Comité Olímpico Internacional cambió la acción de juramentar por la de prometer para cumplir el principio de no-discriminación por religión.

En los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 la promesa volvió a ser modificada con la intención de reforzar los compromisos de igualdad de género y la no-discriminación en cualquiera de sus tipos, y desde entonces es la misma promesa para atletas, jueces y entrenadores.

Bajo esta arista, y para estar acorde a los tiempos del deporte en el mundo, se modificó el texto original, cambiando solo las acciones juramentar por prometer.

2Licenciado en Ciencias del Ejercicio o Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte 

Texto adaptado del libro “Transformar el deporte. 45 Años de la Facultad de Organización Deportiva” (Pérez García y Piña-De la Fuente, UANL, 2019).

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